Éste es Sam...

Después de cuatro años de trabajo, en Estados Unidos, en el año 2001 salió una película escrita por Kristine Johnson y Jessie Nelson (quien además fue la directora del filme). Las escritoras realizaron meses de investigación que incluyeron múltiples entrevistas con personas diagnosticadas con alguna discapacidad intelectual, psicólogos, trabajadoras sociales y convivieron con los miembros de L. A. goal una casa de atención para adultos diagnosticados con alguna discapacidad intelectual donde se involucraron con ellos y conocieron sus estilos de vida, con base en esta investigación escribieron el conmovedor guión que pudimos apreciar en pantalla (Nelson, 2002).

El actor Sean Penn hace una excelente interpretación de Sam Dawson demostrando una gran inteligencia corporal y cinética además de una creatividad sobresaliente según describe Gardner (1993). Sam es un hombre adulto que tiene la inteligencia psicométrica de un niño de siete años, entendiendo que este tipo de inteligencia puede ser medido según los tests psicológicos diseñados para este propósito y recordando que la inteligencia definida para un grupo de edad determinado se calcula con base en el promedio de los resultados obtenidos por los individuos participantes; es decir, si Sam realizara una prueba de inteligencia psicométrica sus resultados serían similares a los esperados para un niño de siete años, esto no quiere decir que tenga el mismo grado de madurez, independencia o capacidad de aprendizaje por ejemplo (Deary, 2004). Vale la pena subrayar que la inteligencia psicométrica no considera el aspecto emocional. La inteligencia emocional, según Gardner (1993) describe, se encuentra en la inteligencia interpersonal e intrapersonal, que se refieren, la primera a la capacidad del individuo para reconocer las emociones de quienes les rodean y establecer relaciones de comunicación satisfactorias con ellos, y la segunda a la habilidad para reconocer las emociones propias y darles el cauce adecuado; en este sentido Sam demuestra tener habilidades mejores a las del promedio.
Sam viste con colores neutros y ropa muy ordinaria: mientras las autoras realizaban su investigación entrevistaron a un hombre que dijo que no le gustaba utilizar colores en su vestuario porque era consciente que en la calle la gente lo volteaba a ver debido a su discapacidad intelectual y no quería llamar la atención aún más (Nelson, 2002).
Después de haber leído el guión Sean Penn pasó tiempo en la casa L. A. goal relacionándose con las personas que ahí acuden y haciendo observaciones que le permitieran recrear de la manera más realista posible los movimientos, el habla y las actitudes de Sam. Como las escritoras pudieron observar, entre las personas con discapacidad intelectual existe una gran diversidad (Nelson, 2002) tal como existe entre las personas consideradas inteligentes (Deary, 2001) y no se puede definir la personalidad de alguien basándose en sus capacidades intelectuales; sin embargo, en este lugar Sean identificó las maneras de hablar de unos, el andar de otro, el movimiento de las manos de otro más y los utilizó para dar vida a Sam como un respetuoso homenaje y un reconocimiento los esfuerzos que diariamente realizan por adaptarse a un mundo que sobre valora la inteligencia según el mismo actor menciona (Nelson, 2002).
El concepto de inteligencia se entiende como una característica global que abarca varias áreas del desempeño intelectual: a esto se le conoce como inteligencia general y permite definir un coeficiente intelectual que funciona como medida numérica de varios aspectos: la capacidad verbal, que incluye el vocabulario, la comprensión del lenguaje y la habilidad de reconocer similitudes y procesar la información; la organización perceptual, que se refiere a la habilidad de distinguir imágenes, distribución del espacio, formas, fondo y figura; memoria de trabajo, que se aprecia mediante la capacidad de una persona para realizar cálculos aritméticos mentales, recordar instrucciones y datos y velocidad de procesamiento, la cual se mide mediante un estudio de la habilidad de la persona para encontrar símbolos y significados y sus relaciones (Deary, 2004).
En este sentido se ha concluido que la inteligencia es un factor general; es decir, no se puede ser muy hábil en un aspecto y muy débil en otro: las habilidades que conforman la inteligencia mantienen una relación entre sí entendiendo que quién tiene una alta capacidad en un área seguramente la tiene en todas las demás y viceversa (Deary, 2004). Sam presenta, de manera consistente con la teoría sobre la inteligencia general, carencias en cada una de estas áreas.
Sam Dawson tiene severas dificultades para leer, para articular el lenguaje, para reconocer mensajes en oraciones complejas, para descifrar mensajes, para realizar operaciones aritméticas:
La capacidad verbal de Sam. Durante toda la historia se puede apreciar a Sean Penn utilizando oraciones simples que siempre inician con el uso del sujeto y un verbo en la mayoría de las veces en presente y sin conjugar (“She have to be with me”) el vocabulario de Sam es muy reducido y le cuesta mucho trabajo leer por lo cual prefiere leer y releer una lectura infantil muy sencilla: “I am Sam”. Cuando refiere en el juicio que fue internado una vez que su mamá enfermó: she got sick, no puede reconocer la diferencia en el vocabulario y comenta: she got sexy sin percatarse del error. Su comprensión del lenguaje es limitada y él lo sabe: “espero que haya dicho lo que yo creo haber entendido” le comenta a Randy, la madre sustituta de Lucy, cuanto ésta le informa que le dirá al juez la percepción de la paternidad que ella ahora entiende gracias a él. Sin embargo hay momentos que propician la reflexión: “puedes llamarme Sam” le dice a Rita una vez que ella señala “no sé como llamarte, mentalmente discapacitado, retrasado, deshabilitado, retardado…”.
La organización perceptual de Sam. Es evidente que Sam requiere de ayuda para organizar los espacios, utilizando sus dedos para separar los frascos de especias que todos los días acomoda en el Starbucks donde labora, que comete errores debido a que no puede organizar el espacio: tira el café sobre una clienta que va pasando, parece que por donde se mueve ocasiona un desastre, no puede servir la crema del café y olvida la tapa de la licuadora, todo esto denota al mismo tiempo un problema en la organización perceptual y en la memoria de trabajo.
La memoria de trabajo de Sam. Rita tiene que hacer uso de toda su paciencia para no desesperar cuando Sam intenta un sencilla operación de suma y resta al ofrecerse a pagar la cuenta de la comida, esta simple operación requiere todo su esfuerzo y concentración. Sam va a visitar a Lucy y no puede soltar el papel con la dirección, al cual tiene que referirse constantemente para encontrar su camino, es como si leyera el nombre de la calle e inmediatamente lo olvidara, leyera el número de la casa y no quedará registro de éste en su memoria.
La velocidad de procesamiento de Sam. Evidentemente todo lo que Sam realiza le toma más tiempo que a la mayoría de la gente, al promedio. Sin embargo para Lucy esto no ha sido jamás un problema y es probablemente debido a que es difícil encontrar un adulto con la paciencia suficiente para un niño: el padre de Conner hace esta representación de manera exacta: Conner intenta recitar de memoria un texto y su padre, Duncan, se impacienta de manera evidente llamando su atención incluso delante de todo la escuela, mientras que Sam parece entender cada pequeña dificultad debido a que él mismo tiene que lidiar con situaciones que le parecen un reto: “el libro que te dio tu maestra esta vez es muy difícil” comenta.
Las otras Inteligencias de Sam.
Gardner (1993) señala siete tipos de inteligencia y las relaciona con la capacidad del individuo de crear soluciones o productos en un ambiente rico en circunstancias. En este sentido Sam Dawson es inteligente cuando encuentra una solución para trabajar mientras lleva a su bebé en una cangurera y posteriormente para dejar a Lucy en casa de Annie y poder ir a trabajar, encuentra solución a su problema de buscar una abogada, soluciona su problema de dinero al cambiar de empleo y pasear perros para obtener ingresos extra, se muda frente a la nueva casa de Lucy para no perder tiempo en el transporte, sabe tratar al cliente de manera “amigable pero no personal” según él mismo dice. Sam sabe cómo consolar, no solamente a Lucy sino a Rita, y sabe cómo relacionarse con los demás: busca consolar a Connor invitándolo a pasar un rato con Lucy en su casa después de que su padre lo avergonzó en la escuela, platica con Willy, el hijo de Rita Harrison, con quien ella misma enfrenta un problema de comunicación.
Estas habilidades de Sam radican en lo emocional y en la falta de represión que Sam tiene. La inteligencia tiene también un aspecto cultural (Gardner, 1993; Deary, 2004) y éste se relaciona con el tipo de sociedad en el que uno se desenvuelve, uno de los aspectos que más llaman la atención de Sam es que ignora todos estos protocolos de comportamiento que se aprenden de manera implícita: Sam no teme entablar una conversación ni expresar su temor o cariño y esto lo acerca a comprender las emociones de quienes lo rodean de manera más simple.
En efecto, es evidente que Sam Dawson es un hombre que sufre de una severa discapacidad intelectual, que su inteligencia psicométrica se encuentra muy por debajo del promedio; sin embargo tiene habilidades en otros aspectos que lo ayudan a resolver varias situaciones problemáticas que surgen en su vida. Si bien la historia de Sam es poco factible en la vida real, esta narrativa ayuda a reflexionar acerca de la naturaleza del amor y las emociones, así como a poner en una perspectiva diferente la inteligencia.
Referencias.
Deary, H. (2004). Una brevísima introducción a la inteligencia. Distrito Federal, México: Océano.
Gardner, H. (1993). Frames of mind: the theory of multiple intelligences. Nueva York: Basic Books.
Nelson, J. (Director). (2002). I am Sam (New Line Platinum Series) [Motion picture]. New Zealand: New Line Home Video.
Imagen tomada de http://dedica.la/artist/I+Am+Sam