¿Inteligente o no?

El coeficiente intelectual de Sam es equivalente al de un niño de 7 años, sin embargo sus habilidades de adaptación y desenvolvimiento sociales, así como la memoria, las tiene muy desarrolladas, por lo que podemos decir que es inteligente a pesar de no tener un coeficiente alto.

De acuerdo a la teoría de las Inteligencias Múltiples de Gardner (2006), podemos asegurar que a pesar de que no tenga desarrollada la inteligencia lingüística (se traba al hablar, no conoce vocabulario y lee con dificultad) ni la inteligencia lógico-matemática (sabe sumar pero no tiene idea del tiempo ni del dinero), tiene bastante desarrollada la inteligencia interpersonal al desarrollarse con otras personas, identificar sus emociones, motivaciones e intenciones, así como ponerse en los zapatos de otros, además tiene la capacidad para reconocer y responder a los sentimientos y personalidades de los otros.

Sam también ha desarrollado la inteligencia intrapersonal pues conoce sus propias limitaciones y sus capacidades, reconoce sus necesidades y trata de satisfacerlas lo mejor posible (trabajo, casa, emociones). Según la teoría de Gardner, los daños en el área inferior de los lóbulos frontales producen irritabilidad o euforia como la que Sam suele reaccionar ante las situaciones difíciles.

Por otro lado, Sam tiene inteligencia emocional que es “la capacidad de reconocer nuestros propios sentimientos y los de los demás, de motivarnos y de manejar adecuadamente las relaciones interpersonales” (Goleman, 2007) aunque le hace falta trabajar un poco en el control de emociones.

Arango (2006) señala que: el coeficiente intelectual es una manera de evaluar la inteligencia; pero no determina el pensamiento, el destino o la manera como las personas se adaptan de forma creativa a su medio ambiente. Por otro lado, desde la perspectiva de la inteligencia emocional, es importante ver el grado de adaptabilidad, sensibilidad, expresión del afecto, entre otros, que las personas pueden desarrollar.

Por otro lado es importante resaltar que Lucy es más inteligente que los chicos de su edad, tiene ideas y vocabulario más avanzado, en los dibujos que hace en la escuela se denota que ella se sentía responsable de su padre y con la responsabilidad de ayudarlo.

Referencias:

Arango de Narváez, M. T. (2006). Haga a su hijo un gigante emocional. Colombia: GAMMA
Gardner, H., & Everest, S. (19951994). Estructuras de la mente: la teoría de las inteligencias múltiples(2. ed.). México: FCE.
Goleman, D. (2007). La inteligencia emocional (1. ed.). México, D.F.: Bolsillo Zeta.